En #ReinaelArte os traemos hoy otro retrato de Isabel, esta vez no tan conocido como otras ocasiones, muy reciente y del que tenemos una reproducción en este palacio. Se trata de la obra del vallisoletano Juan Antonio Morales (1909 – 1984), uno de los mejores retratistas de su época. En 1950 realizó los retratos de los Reyes Católicos que luego sirvieron como modelo para el famoso billete de 1000 pesetas acuñado en 1957 y que estuvo en curso entre 1958 y 1978.

En el caso del retrato de Isabel I de Castilla se ve una clara influencia de la obra “La Virgen de la Mosca”, la famosa pintura flamenca de principios del siglo XVI, conservada en la Colegiata de Toro (Zamora), en la que aparece una figura que muchos historiadores han identificado con la reina Isabel (otros la identifican con Santa Catalina).

En este retrato nos encontramos con una reina muy joven que se identifica con la descripción de hizo de ella Hernando del Pulgar:

<<De comunal estatura. Bien compuesta. Muy blanca y rubia, los ojos entre verdes y azules, cara hermosa y alegre, mirar gracioso y honesto, las facciones del rostro bien puestas.>>

Hernando del Pulgar

Y efectivamente, estos rasgos son los que podemos ver en esta obra, en la que destacan los detalles del vestido, el collar de perlas rematado en una cruz y que sujetan un velo transparente que dejar ver una larga y rubia melena rizada sobre la que descansa la corona. Aparece con actitud calmada y serena, muy tranquila, con la mirada ausente, pero consciente de lo que puede estar ocurriendo a su alrededor. Características que nos recuerdan a otras obras en las que aparece la reina Isabel, anteriores a Juan Antonio Morales, como la Virgen de los Reyes Católicos (Museo del Prado) o el retrato de Juan de Flandes (Galería de Colecciones Reales).

This site is registered on wpml.org as a development site. Switch to a production site key to remove this banner.