Los Reyes Católicos recibiendo a los cautivos cristianos en la conquista de Málaga.

Eduardo Cano de la Peña. 1866, Museo de Sevilla.

Los Reyes Católicos recibiendo a los cautivos cristianos en la conquista de Málaga. Eduardo Cano de la Peña. 1866, Museo de Sevilla.

Otro de los episodios del reinado de los Reyes Católicos que ha surtido de infinidad de temas a lo largo de la historia del arte sin duda ha sido la Guerra de Granada. Tema central en cualquier estudio sobre los monarcas católicos la guerra granadina fue ya durante su época epopeya central de su reinado. Hoy nos detenemos en un suceso quizá secundario que narra con precisión Andrés Bernáldez en su Historia de los Reyes Católicos don Fernando y doña Isabel. Este historiador, conocido popularmente como el cura de Palacios, fue coetáneo de los reyes y fuente muy importante para conocer de primera mano toda una época. Según el cronista, tras la toma de Málaga en septiembre de 1487, los reyes mandaron recibir en persona a cuantos cristianos estaban cautivos en la Málaga musulmana. De tal manera desfilaron unos doscientos cautivos que acudieron ante Isabel y Fernando aún con sus grilletes y en muestra de agradecimiento besaban las manos y los pies de los monarcas.

Eduardo Cano recoge casi al pie de la letra la escena narrada por Bernáldez, los reyes aparecen saliendo de su tienda centrando la composición del cuadro. Destaca la figura de Isabel, más alta y mejor iluminada que el resto de personajes con la mirada perdida en el cielo con una actitud beatífica. Tanto ella como su esposo reciben los besos y alabanzas de los cautivos. Los prisioneros cristianos de la ciudad de Málaga vestidos con harapos apenas pueden mantenerse en pie. La maestría en el tratamiento de la luz y la precisión en el dibujo atesoraron al lienzo una primera medalla en la Exposición Nacional de 1866.